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EL HURACAN PAULINA

CUENTAS PENDIENTES

Alfredo López Rosas

Los estragos del huracán Paulina el 9 de octubre de 1997, mostraron con toda realidad el sistema político del municipio como una muestra de la repartición de los cargos políticos, como pago a la lealtad y sumisión sin manifestar las habilidades y preparación, dejando a la sociedad acapulqueña el pago de las consecuencias.

Desde los días 5 y 6 de ese mismo mes y año, se observó la depresión número 18 del Pacífico siguiendo su metamorfosis hasta llegar al grado de huracán. En la madrugada del fatídico día 9 se vació en las lluvias de 411.2 mm en nuestra ciudad. SMN. Los días 5 al 10, se emitieron 32 avisos, 2 boletines. El diputado César Lonche Castellano de la comisión de deputados federales, afirmó que a las autoridades estatal y municipales fueron informadas con 48 horas de anticipación del fenómeno natural que entraría al puerto y no tomaron las precauciones que se ameritaba.
El director de Protección Civil en Acapulco, Efrén Valdés Ramírez, cuya única virtud para ocupar el neurálgico cargo eran sus servicios en la campaña política del presidente municipal, huérfano del perfil técnico, sin los elementos, ni siquiera con una oficina y personal para actuar.
El presidente municipal Juan Salgado Tenorio, brilló por su ausencia, las rumoradas escapadas de la sobriedad del edil con el personal de sus confianza, le tomó de sorpresa la llegada del presidente Zedillo Ponce de León, quién tomó el liderazgo para auxiliar a los acapulqueños y puso a disposición la ayuda que enviaban los estados y los países.
La Terminal Marítima en la ciudad daba entrada a los vehículos oficiales y de La Cruz Roja, tenían acceso para abastecer víveres, los cuales iban a dar a las casas de líderes priístas y de la mayoría de regidores, quienes indebidamente vendían los enseres, mientras la población carecía de ellos.
Abimael Salgado, ex-regidor y dirigente priísta de la Zapata, fue acusado de secuestrar tres traileres de auxilio, estacionarlos frente a su domicilio y negarse a toda costa a que fueran repartidos alegando que "eran para sus gentes".
José Luis Torreblanca, regidor de la comuna porteña también fue acusado de acaparar y vender despensas, se le señaló de acaparar ayuda, ante la presión de un grupo de reporteros, abre las puertas de la bodega en que guardaba varias toneladas de víveres, medicamentos, agua y ropa, comprobándose así, que las acusaciones tenían fundamento.
Se citan los nombres del Secretario General de Gobierno, Humberto Salgado Gómez; del Secretario de Programación y Presupuesto y ex-presidente municipal de Acapulco, René Juárez Cisneros; del presidente municipal porteño, Juan Salgado Tenorio, que podría comparecer ante El Congreso para deslindar responsabilidades. Nada.
Los empresarios asumieron la responsabilidad de la recaudación de fondos del Fideicomiso pro Reconstrucción asentada en la escritura 15632, de La Notaría 17 de fecha del 16 de octubre de 1997, además estos donativos serían depositados en las cuentas 53713-6 y 5356-6, abiertas en Grupo Financiero Inverlat sucursal 003 de Acapulco, aún reportaban como intocable el saldo inicial de operaciones de un mil 149 millones de pesos. El presidente de este fideicomiso fue Cesar Bajos Valverde, integrado por José Araujo Aguilar, en calidad de coordinador ejecutivo, y Eduardo Marrón Orozco, Emilio Villarreal Nader, Javier Saldívar Rodríguez, Óscar Meza Celis, Pedro Kuri Yazbek, Vicente Eloarraga Berdegué, Javier Morlet Sutter, Salvador Soto, José Gutiérrez, David Macías, Marcos Estrada, Zeferino Torreblanca Galindo, entre otros.
En las cuentas de La Cruz Roja Mexicana, se habían depositados ocho millones 117 mil 532.82 pesos, y 935 mil 378 dólares más en cuentas similares de Los Ángeles y Nueva York, todas con la consigna de que estos recursos fueran canalizados de inmediato al Fideicomiso Huracán Paulina pro Reconstrucción de Acapulco.
El creer que todo el daño ocasionado por el meteoro Paulina, se debe a la naturaleza y contra ésta estamos inermes, es querer justificar las irresponsabilidades de los funcionarios que de cumplir con sus deberes para los que protestaron a su cargo, muchas vidas y miles de damnificados se les hubiese protegido de los daños irreversibles.
Las cuentas pendientes debes ser saldadas a doce años de la desgracia natural magnificada por la corrupción de los funcionarios, ellos son responsables de los asentamientos humanos irregulares, que motivaron, taponaron cauces y canales, además de la mal proyectadas construcciones, pero aceptadas para provechos económicos y políticos.
A doce años del día más luctuoso de la ciudad, hay que señalar a los culpables, responsable antes, en y después de la desgracia citadina.
No es suficiente el que haya renunciado a la presidencia municipal Juan Salgado Tenorio. No existe, ninguna denuncia penal, ninguna inhabilitación, ninguna detención, nadie está en la cárcel por irresponsable
Se equivocan los culpables que con una misa al año se puede mantener la impunidad de los que participaron negligentemente ante muertes y daños en vidas y en propiedades de gobernados que hoy los sobrevivientes observamos que se mantienen en el poder, en la impunidad.
Desde hace doce años se llora la muerte de los caídos por el huracán; dos de los responsable y que disfrutan de la impunidad con ingrediente de amnesia, el presidente municipal de Acapulco Manuel Añorve Baños y su primo el senador Ángel Aguirre Rivero, festejan, bailan, se divierten, se futurizan para la gubernatura en Tlapa en el cumpleaños del presidente municipal de aquella ciudad Wille Reyes Ramos, raya en la burla, el cinismo, en la ofensa que en ese mismo día las viudas, los huérfanos, las esposas, los ciudadanos de Acapulco y de muchas ciudades de Guerrero, aún lloran a sus muertos.
Es tiempo de que paguen sus deudas pendientes por el huracán Paulina, Manuel Añorve Baños, Juan Salgado Tenorio, Ángel Aguirre Rivero, René Juárez Cisneros. Abímael Salgado, José Luís Torreblanca, Efrén Valdés Ramírez, Humberto Salgado Gómez, César Bajos Valverde, Zeferino Torreblanca Galindo.

Por la memoria de los que murieron pongamos un basta a la impunidad a la amnesia y a las burlas, sólo así pondrán descansar en paz y nosotros vivir tranquilos. YA BASTA.

licalfredolr@hotmail.com 10 Oct 09

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