Chilpancingo, Gro., octubre 20 de 2009 (IRZA).- Alrededor de 185 loros y pericos que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) requisó a un grupo de personas que los transportaban en un vehiculo en la carretera Ometepec-Acapulco, en la Costa Chica del estado y que posteriormente esa dependencia donó al zoológico Zoochilpan de esta capital, murieron por diversas enfermedades.
Alejandra Gómez Salmerón, responsable del área de Cultura del Zoochilpan, explicó que cuando los inspectores de la Profepa decomisaron a los 200 pericos y loros estaban muy maltratados y enfermos.
"Nos los trajeron aquí el zoológico, los cuidamos, los desparasitamos, pero desafortunadamente solamente lograron sobrevivir 15 de ellos", dijo.
Entrevistada este martes en la explanada de la plaza cívica "Primer Congreso de Anáhuac", donde el zoológico instaló un stand donde proyectaron un video que muestra los atractivos de este parque, Gómez Salmerón, señaló que en Guerrero, sobre todo en las Costa Chica y Costa Grande, es grave el tráfico de diversos animales en peligro de extinción.
En el stand, se colocó una jaula con un loro de cabeza blanca, especie que se encuentra en peligro de extinción.
Mencionó que en la capital del estado se ha visto a gente que anda en las calles vendiendo en dos y hasta tres mil pesos a un perico o a un loro.
"Sin duda alguna mucha gente sabe que esto es un gran negocio y por eso se arriesga meterse a algunas partes de la Sierra para ir a capturar este tipo de animalitos a quienes le cambian de manera desastrosa su hábitat", refirió. (Agencia de Noticias IRZA)
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